La compra de viviendas por parte de los extranjeros marcó su máximo histórico en 2013 ya que este colectivo sumó el 11,15% de las compraventas de viviendas registradas, según el anuario inmobiliario del Colegio de Registradores. Así, unas 36.600 viviendas fueron adquiridas el pasado año por ciudadanos foráneos, lo que supone un incremento del 36,6% respecto a las 26.790 adquiridas en 2012. En 2009 la cifra de compraventas por parte de extranjeros era sólo del 4,45%. El anuario también destaca que se ha producido un cierto cambio en el perfil del comprador foráneo de vivienda. Ahora, la mayoría de ellos adquieren una casa con fines turísticos, mientras que antes de la crisis económica los extranjeros que compraban viviendas en España lo hacían por motivos de asentamiento laboral. Por nacionalidades, los británicos siguen siendo los que más compran en nuestro país, un 15,1% del total de las viviendas adquiridas por foráneos. Les siguen los franceses, con un 9,8%; los rusos (8,5%); los belgas (7,26%); los alemanes (7%); los suecos (5,6%); los noruegos (5,2%); los italianos (3,6%); los argelinos (3,2%) y los chinos (3%). Según el informe del Colegio de Registradores, el descenso en el precio de la vivienda ha hecho que España sea, para las nacionalidades menos afectadas por la crisis económica, un lugar atractivo para invertir en vivienda. En referencia a las Comunidades Autónomas, la compra de vivienda es significativa en Baleares (30,73%), Comunidad Valenciana (24,83%) y Canarias (24,60%), zonas con mayor peso de segunda residencia. Por otra parte, las reformas legislativas que posibilitan la concesión de permisos de residencia a extranjeros que realicen adquisiciones inmobiliarias por importe igual o superior a 500.000 euros supusieron el 4,72% del total de compraventas realizadas por extranjeros. De ellas, el 57,8% las protagonizaron ciudadanos comunitarios y el 42,1% no comunitarios.